A la coloración amarilla de toda la piel se le denomina ictericia. Se debe a una acumulación anormal de pigmentos biliares en la piel. Esta pigmentación proviene de una alteración en el metabolismo de la bilirrubina, la cual a su vez, proviene de la destrucción de los eritrocitos (glóbulos rojos de la sangre). Vale la pena resaltar que las causas son muy variadas, desde anemia con destrucción de glóbulos rojos de manera acelerada hasta la obstrucción de un conducto llamado colédoco que se encarga de transportar la bilis producida en el hígado hacia el intestino delgado y esto lo podría estar ocasionando un tumor en el páncreas por la compresión de estas estructuras. Otra causa frecuente son medicamentos que generen daño al hígado (toxicidad hepática) y desencadene un cuadro de hepatitis o inflamación aguda del hígado.
Como podemos observar, las causas son muy variadas; el diagnóstico se puede realizar mediante un interrogatorio médico completo, exploración física y además algunas pruebas de laboratorio con las pruebas de función hepática y además la realización inicial de estudios de imagen como ultrasonido de hígado o tomografía con cortes específicos del páncreas para descartar que no se trate de un tumor pancreático.
El tratamiento, evidentemente deberá encaminarse a la causa y puede ser desde suspender los medicamentos que generaron el daño del hígado hasta la extirpación de algunos tumores que generen esta retención de pigmentos biliares y la coloración amarilla de los pacientes. Definitivamente este síntoma no debe ser tomado a la ligera, puesto que algunas causas pueden ser muy
graves y deben ser tratadas con prontitud. Acude a una revisión con tu médico de confianza.