El hígado es un órgano muy importante que regula muchas funciones de nuestro cuerpo. Se encuentra en el lado derecho de nuestro abdomen por debajo de las costillas, a un lado de la vesícula biliar. Una de las principales funciones es desintoxicar y además metabolizar los medicamentos que ingerimos como antibióticos o analgésicos. Si el hígado no funciona de manera adecuada, estas toxinas o incluso medicamentos que consumimos pueden generar daños irreversibles en el resto de los órganos como el riñón o el cerebro. De tal manera que cuando una persona está enferma del hígado, tiende a tener alteración en la función de su riñón y también alteración del estado de alerta (algo llamado encefalopatía hepática).
Muchas personas se preguntarán si existe manera de saber si hay daño del hígado, y la respuesta es sí. En general incluso con el aspecto de las personas que padecen del hígado (cirrosishepática) se puede sospechar esta enfermedad. Evidentemente en la actualidad hay estudios de laboratorio que se pueden solicitar para saber si alguien tiene alterada la función de su
hígado e inclusive se puede ver la estructura del hígado mediante estudios de imagen (principalmente tomografía y ultrasonido de hígado).
Si tengo enfermedad del hígado, ¿qué debo hacer? Definitivamente no es una enfermedad que se deba tomar a la ligera, es una enfermedad que debe ser tratada de manera adecuada para lograr un mejor pronóstico y tener una mayor sobrevida sin llegar a presentar más complicaciones. La ciencia médica ha avanzado de una manera sorprendente, y se han desarrollado tratamientos efectivos para hacer que una enfermedad tan devastadora como es la cirrosis hepática se logre controlar. Es difícil decir que se pueda curar el daño del hígado, pero al menos se puede evitar que progrese a mayor gravedad.
Recordar que siempre hay expertos en el área que pueden hacer un diagnóstico adecuado y lo más importante un tratamiento que logre buenas expectativas y calidad de vida a largo plazo de las personas que lo padecen.